Las rebajas de enero de cada año son un buen momento para que los establecimientos puedan aumentar las ventas de productos después de la campaña de Black Friday y la de Navidad. Sin embargo, los consumidores debemos estar informados y ser capaces de adoptar una serie de recomendaciones que hagan de nuestras compras un momento eficaz y controlado.
La OMIC informa:
Las ventas en rebajas podrán tener lugar en los periodos estacionales de mayor interés comercial según el criterio de cada comerciante. La duración de cada periodo de rebajas será decidida por cada comerciante.
Existe venta en rebajas cuando los artículos objeto de la misma se ofertan, en el mismo establecimiento en el que se ejerce habitualmente la actividad comercial, a un precio inferior al fijado antes de dicha venta.
Para poderse anunciar debe estar rebajado al menos el cincuenta por ciento de los productos a la venta. Si se venden productos rebajados con no rebajados deben estar claramente separados.
No cabe calificar como venta en rebajas la de aquellos productos no puestos a la venta en condiciones de precio ordinario con anterioridad, así como la de los productos deteriorados o adquiridos con objeto de ser vendidos a precio inferior al ordinario.
En cualquier caso, es importante contar con la máxima ayuda posible para sacar el máximo rendimiento a nuestro dinero y es por ello que desde la OMIC de Majadahonda aconsejamos lo siguiente para acudir a rebajas con garantías:
1.- Elaborar un presupuesto y hacer una lista de compras.
Es primordial establecer una cantidad de dinero para gastar, de acuerdo con las posibilidades de cada uno, y no sobrepasarla. Lo más adecuado es hacer una lista con los artículos que se necesitan (ropa, calzado, complementos, menaje, electrodomésticos, etc.) y estimar un precio aproximado para cada uno de ellos.
2.- Las etiquetas deben indicar el precio rebajado junto con el anterior.
La etiqueta de cada artículo a la venta debe llevar el precio anterior y el precio rebajado o, en su defecto, el porcentaje de la rebaja.
Los artículos rebajados tienen que cumplir las mismas normas de calidad y etiquetado que durante el resto del año. En prendas textiles, hay que revisar con atención la etiqueta, en la que debe figurar la composición, el tratamiento de lavado y planchado y la talla. En el caso de los electrodomésticos, la etiqueta debe contener el grado de eficiencia energética y en caso de juguetes el certificado CE entre otros datos.
3.-Comprobar que la calidad es la misma.
Durante las rebajas, el producto debe tener la misma calidad que el resto del año, a fin de comprobar la calidad del producto es conveniente acudir antes de las rebajas y hacer una foto del etiquetado y comprobarlo con el etiquetado del producto después de rebajas.
4.- Diferencia de rebajas con otras ventas especiales.
Rebajas: son las ventas de artículos de igual calidad que en otra temporada, pero a un precio más bajo.
Ventas de promoción: son las que se realizan a un precio inferior o en condiciones más favorables que las habituales, con el fin de incentivar la venta de determinados productos.
Saldos: son productos ofertados a un precio más bajo por causa de un desperfecto, deterioro u obsolescencia.
Liquidaciones: son ventas de carácter excepcional debido al cese de la actividad del comercio, traslado, modificación del negocio o similares.
5.- No abusar de las tarjetas de crédito.
Para poder hacer frente a las mensualidades posteriores, hay que establecer un límite razonable en las compras. Los créditos rápidos no son aconsejables por su elevado tipo de interés y por tanto de endeudamiento para las personas consumidoras. Es fundamental examinar el TAE (precio total del préstamo) que deseamos contratar y además aprovechar que numerosos comercios ofrecen la financiación gratuita para la compra de sus productos.
En cualquier caso, mientras sea posible, es mejor comprar lo que se pueda pagar en efectivo o por tarjeta de débito, ya que las tarjetas de crédito, a menudo, distorsionan la visión de los gastos.
6. En Internet hay que comprar en sitios seguros.
Se debe comprar en sitios seguros online, debe verificarse que la página web incluye los datos fiscales íntegros de la empresa (razón social, CIF, dirección completa incluida localidad, correo electrónico, teléfono). La página web tiene que tener el protocolo “https” y es conveniente que esté sometido a un código de conducta (por ejemplo confianzaonline) y si es posible que publicite que está sometida al sistema arbitral de consumo con el uso del distintivo "establecimiento adherido arbitraje de consumo".
Recuerde que existe un derecho de desistimiento en la compra de bienes a distancia de 14 días y para una posible reclamación es más fácil si el establecimiento está ubicado en España.
7. El establecimiento no está obligado al cambio o devolución del producto.
Si realizamos una compra en un establecimiento, recuerde que no están obligados a cambiar o reembolsar el dinero de productos en los que no existe una falta de conformidad. La posibilidad del cambio o devolución de un artículo se considera una atención comercial y solo se realiza cuando así lo acepta el comercio. Por ello, es conveniente conocer la política de devoluciones de cada comercio. Tenga en cuenta que la política de cambios o devoluciones se puede informar a la persona consumidora de manera oral y luego tiene que ir plasmado en el contrato de compra del producto que normalmente es la factura. Los cambios se pueden hacer por otro producto o un vale. La publicidad vincula durante su plazo de vigencia al empresario que la emite.
8. Garantía de los bienes rebajados
En caso de falta de conformidad la garantía de los productos rebajados es la misma que la de los no rebajados. Recuerde que el período de garantía mínimo de bienes de consumo será de tres años y dos años si se trata de contenidos o servicios digitales. En el caso de bienes de segunda mano se podrá pactar una garantía que no podrá ser inferior a un año.
9. Guardar los comprobantes de pago, factura simplificada y garantías.
Se deben guardar siempre los justificantes de compra, facturas y publicidad como únicas garantías ante un posible cambio, devolución o reclamación. Los certificados de garantía tienen que estar debidamente cumplimentados y con identificación de la empresa que ofrece la garantía.
10. Reclamar en caso de conflicto con el establecimiento.
Es recomendable que el comercio (físico u online) esté adherido al Sistema arbitral de Consumo. El Sistema arbitral es un procedimiento extrajudicial que resuelve conflictos entre consumidores y empresas, es de carácter gratuito para las partes, es más sencillo que la vía judicial y habitualmente más rápido y finaliza con una resolución que se llama laudo de carácter vinculante para las partes y que puede ser objeto de ejecución en los Tribunales.
Para saber si un establecimiento está adherido a arbitraje lo tiene que anunciar con el distintivo naranja antes citado a la entrada del establecimiento o en la página web. Si no está adherido depende del comercio aceptar si desea o no someter las discrepancias a arbitraje.
Conocerá de la reclamación la Junta Arbitral (nacional, autonómica, etc…) que resulte competente según el ámbito territorial en que el comercio haya declarado realizar su actividad. Existen registros accesibles online para consultar si una determinada entidad está adherida.
Durante todo el año (incluidos los periodos de rebajas), los establecimientos tienen que contar con hojas de reclamaciones a disposición de los clientes. En caso de tener una discrepancia rellene la hoja de reclamaciones y llame a la Oficina de Consumo de su municipio donde le informarán cómo reclamar en cada caso.
En el caso de Majadahonda la Oficina Municipal de Atención al Consumidor está situada en la Avd. Guadarrama nº 34, edificio lateral derecho, el teléfono de atención al público es 916349107, el horario de atención al público es de lunes a viernes laborables de 9 a 14 horas.
En todo caso, siempre se puede acudir a la vía judicial. Existen los servicios de orientación jurídica gratuita donde el consumidor se puede informar llamando al 900 814 815.